Mérida, 17 Mar (Notimex).- La tarea de la caricatura y los caricaturistas en México debe ser el permanecer como un espacio crítico y un verdadero contrapeso a las decisiones de los gobernantes, declaró en esta ciudad el dibujante Darío Castillejos.
“Yo creo que a más de 100 días del inicio en un nuevo gobierno, el papel de la caricatura no ha variado y sigue siendo un contrapeso crítico del poder, es una voz crítica a las decisiones que toman los gobiernos y así debe de seguir”, señaló en entrevista.
Poco antes de impartir la conferencia “A cartón quitado”, visiones de México a través de la caricatura", en el marco de la octava edición de la Feria Internacional de la Lectura Yucatán, también considero que los caricaturistas mexicanos no deben renunciar a su vocación crítica, “ahora sí, que pase lo que pase o tenga que pasar”.
“Independientemente de ideologías o posturas políticas, el caricaturista siempre debe de tomar y defender ese papel, y en ese sentido, creo que lo está pasando en el país es inédito también, pues vivimos cambios y decisiones que hasta hace unos meses se creían imposibles”, añadió.
“Hoy tenemos un gobierno que escucha, cuando la tónica de antes era de ni los veo ni los escucho, por lo que seguramente quienes nos dedicamos a esto, tengamos un proceso de adaptación en todos los sentidos y los medios de comunicación tampoco escaparán de ese proceso”, consideró.
Sin embargo, continuó, en medio de esta transición habrá cosas que no pueden variar y una de esas cosas es precisamente es la voz crítica de la caricatura, porque si pierde esa esencia y vocación, deja de ser caricatura, sobre todo si hablamos de caricatura mexicana.
“En una democracia caben todas las voces y parte de la labor del caricaturista debe ser señalar las cosas que no está haciendo un gobierno o que está haciendo mal”, abundó el colaborador de medios como “El Imparcial” de Oaxaca y Foreign Affairs Latinoamérica (entre otras).
En ese sentido, el artista y comunicador oaxaqueño consideró, desde su punto de vista personal, como inadecuado calificar a algunos medios por sus posturas ideológicas o por criticar las decisiones del gobierno, con calificativos como “fifís” o “chayoteros”.
“Pero aún así, debo y debemos reconocer, que a pesar de ello, no ha habido un intento del actual gobierno por cerrar o censurar esos espacios o medios que no concuerdan con sus decisiones, y es tarea de quienes nos dedicamos a la caricatura, tener los ojos muy abiertos para no dejar de señalar lo que sea y no sea correcto”, subrayó.
El entrevistado estuvo acompañado en su ponencia por el dibujante y caricaturista Angel Boligan, y ésta se realizó en el Centro de Convenciones Siglo XXI, sede de la Filey.